Conexiones

 

Mucho de la Teoría de los Constructos Personales es fenomenológico. Kelly reconoce su simpatía por las teorías fenomenológicas de Carl Rogers, Donald Snygg y Arthur Combs, así como por los “teóricos del self” tipo Prescott Lecky y Victor Raimy. Pero era escéptico con la fenomenología per se. Como muchos otros, asumía que la fenomenología era un cierto tipo de idealismo introspectivo. Pero, tal y como compartiremos en los capítulos siguientes, esta es una asunción errónea.
Así, un fenomenólogo encontraría muchas coincidencias con la teoría de Kelly. Por ejemplo, Kelly cree que para entender el comportamiento, necesitamos comprender cómo la persona construye la realidad; a saber, cómo la entiende, cómo la percibe, más que verdaderamente qué es la realidad. De hecho, puntualiza que la visión de cualquiera de la realidad (incluso aquella del científico más preciso) es simplemente eso: una perspectiva. Y sin embargo sostiene que, de forma empática, no hay peligro aquí de solipsismo (la idea de que el mundo es sólo mi idea), ya que se ve sobre algo. Este es exactamente el significado del principio básico de la fenomenología, conocido como intencionalidad.
Por otro lado, hay aspectos de la teoría de Kelly que no son congruentes con la fenomenología. En primer lugar, Kelly fue un verdadero constructor teórico y los aspectos técnicos de su teoría dan fe de ello. Los fenomenólogos, al contrario, tienden a evitar la teoría. En segundo lugar, él esperaba con ahínco una metodología rigurosa para la psicología, aun cuando el científico experimental fuese su metáfora graciosa. La mayoría de los fenomenólogos son mucho más escépticos con respecto a la experimentación.
El énfasis en la construcción de la teoría; por el detalle fino, y por la búsqueda de una metodología rigurosa para la psicología hace que Kelly sea muy atractivo para los modernos psicólogos cognitivos. El tiempo nos dirá si Kelly será recordado como fenomenólogo o como cognocivista.